viernes, 13 de marzo de 2015

POCO A POCO REGRESO

  ¿Cómo puedo empezar después de tanto tiempo...?
Pues lo haré explicando un poco el motivo de mi desaparición o que ha sido de mi vida estos meses. 
  A finales de octubre encontramos el sitio perfecto para montar el estudio de fotografía de mi marido. Es un local del que llevo muchos años enamorada, sus techos altos y su magnifica escalera, tiene algo muy especial. Aunque no hubo que hacer más obra que pintar , la cosa se fue alargando... Desde finales de noviembre hasta el 12 de diciembre que fue la apertura nos pasamos día si y otro también trabajando en, por y para el estudio. Compramos muy poquitos muebles, saqueamos a familiares y conocidos reciclando todo lo que pudimos. Intentando dejar nuestra huella y nuestro estilo. Y , si, me incluyo porque aunque la empresa sea de mi marido es un proyecto común con el que vivimos día a día.

Todas las fotos son de móvil, en casa del herrero ya se sabe...
 

  El día 12 fue un día muy especial, no se me olvidarán los nervios ni las lagrimas de emoción. Para nosotros ese día representaba la presentación de todo en lo que habíamos trabajado tan duro y con tanta ilusión. Vinieron nuestros familiares y amigos y muchos clientes, se llenó de gente charlando, tomandose una copita de vino cortesía de nuestro cuñado de "El Patio de mi Casa", comiendose un cupcake de la mesa dulce que nos hizo mi hermana y de niños jugando en la escalera. Y no tenemos fotos decentes...




 


  Qué difíciles son los inicios y cumplir los sueños, muchísimo, pero se puede.
Creía que todo volvería a la normalidad tras la inauguración pero con las Navidades no hay manera de organizarse. Y yo a parte tengo otros trabajos.






  Llegó enero y mi vida seguía patas arriba, lo mas que acerté fue a trasladar algunas de mis cosas de costura al local, allí tengo mi propio cuarto taller!
Mi máquina dejó de coser (puñetera...)
Conseguí sacar los encargos adelante con la maquina de mi madre.



  Febrero seguimos mas o menos igual aunque ya se van asentando los horarios y se agradece. Pero el trabajar los 7 días de la semana pasa factura. No puedo decir que tenga jornadas maratonianas, ni me pego madrugones pero tampoco tenemos días de descanso para escaparnos y desconectar.

Seguimos con la casa manga por hombro, lo que hizo de estudio el último año debería de recuperar su condición de salón, pero puede esperar un poco...

  Llegó marzo y poco a poco iré también recuperando el blog, aunque no tengo clara su forma, los pedidos es otro tema del que seguramente hable en otro próximo post.

  También estoy inmersa en otro proyecto del que todavía no puedo hablar pero me hace mucha ilusión y creo que a mediados de abril podré contar algo.

  ***Muchas gracias por seguir ahí***


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